En los últimos días se ha suscitado una discusión absurda sobre la pertinencia de interpelar al Ministro de Educación, Jaime Saavedra. ¿Quiénes son los principales enemigos del Ministro Saavedra al día de hoy? A la cabeza tenemos a la fujimorista Lourdes Alcorta, que ha pedido la interpelación; el aprista Mauricio Mulder, que ha pedido que el Ministro de un paso al costado; y a toda la bancada de Fuerza Popular, según lo ha manifestado su vocero Luis Galarreta. La procedencia de los ataques por sí misma despierta sospechas. ¿Los motivos del ataque? El escaso avance en los preparativos para los Juegos Panamericanos del año 2019. ¿Existe entonces una repentina preocupación aprofujimorista por el deporte y por la imagen del Perú como sede de los juegos? Esa es una opción. La otra opción es que existen intereses, sobre todo económicos, que se verían muy beneficiados con la salida del Ministro de Educación. De caer el Ministro, perdería legitimidad la Nueva Ley Universitaria, aprobada durante su gestión en el gobierno anterior. Para entender por qué esto sería conveniente para el eje anti-Saavedra, hay que seguir el dinero.

El vil metal

El Parlamento está lleno de congresistas y funcionarios que están abiertamente contra la nueva Ley Universitaria (NLU), y por tanto contra la SUNEDU (entidad creada por la NLU). ¿Quiénes son ellos? En una nota reciente Luis Davelouis los identifica. En la bancada de Fuerza Popular se encuentran Osías Ramírez (sobrino de Fidel Ramírez, rector de Alas Peruanas) y Miguel Ángel Elías (hermano del fundador de la Universidad San Juan Bautista de Ica). Además de los congresistas, José Cevasco, Oficial Mayor del Congreso designado por el fujimorismo, trabajó para un conjunto de universidades como lobista dentro del Congreso en contra de la NLU. Por otro lado, el partido de la estrella tiene en la Universidad San Martín de Porres y en la Federico Villareal dos bastiones importantes que también se verían afectados por la Ley Universitaria. Uno de los cambios tiene que ver con la disminución de la proporción de profesores a tiempo parcial, lo cual disminuye la capacidad de mantener una correlación de fuerzas fuertemente influenciada por las autoridades de turno. Este y otros cambios que SUNEDU indica significan una fuerte inversión de dinero en favor de una mejor calidad educativa.

Perú campeón

No se necesita ser ni muy brillante ni muy conspirativo para darse cuenta de que los motivos descritos en las líneas precedentes bastan para el derroche de mezquindad y cálculo político, disfrazado de preocupación por el deporte, del cual estamos siendo testigos. Esto no significa que no debamos preocuparnos por la realización de los Panamericanos. Es legítimo desear información sobre el avance de las obras y la organización de tan importante evento deportivo. Sobre esto, el Congresista oficialista Alberto de Belaúnde ha señalado que la construcción de infraestructura está programada para el 2017 y que actualmente las obras se encuentran en la etapa de los estudios de pre-inversión.

Finalmente, recordemos que las facultades legislativas para simplificar los trámites de contratación de personal y servicios para los juegos ya han sido aprobadas y el ministro Saavedra estará en la Comisión de Educación el día lunes. Más que suficiente para despejar las legítimas dudas al respecto. Si incluso después de la presentación del lunes se insiste en interpelar al ministro o exigir su renuncia, será incluso más evidente que el asunto de los Panamericanos no es sino una excusa para boicotear el desarrollo de la educación superior en el Perú.